Formación

Las personas que trabajamos en el Hospice recibimos una formación que nos prepara para desarrollar nuestra tarea tomando como base la filosofía “Hospice” de cuidado.
Asimismo ofrecemos capacitaciones abiertas para la comunidad, con la finalidad de difundir esta modalidad de cuidado y aportar herramientas a quienes acompañen seres queridos que atraviesan situaciones de enfermedad sin cura y progresiva.
Esta filosofía propone un tipo especial de cuidado diseñado con la máxima sensibilidad que tiene como propósito dar apoyo y cuidado a las personas que están en la etapa final de una enfermedad progresiva y sin cura.
El cuidado Hospice se orienta hacia la persona enferma y su familia. Procura que el paciente pueda sobrellevar el alerta, liberarse del sufrimiento y encauzar otros síntomas de modo que pueda vivir sus últimos días con dignidad y calidad, permitiéndoles vivir de la manera más plena y confortable posible, trascendiendo cada instante de su presente.
Los cuidados competentes y compasivos ayudan a mejorar la calidad de vida.
El Hospice es una confirmación de la vida con mira a la muerte como un proceso natural. .